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Un equipo de ventilación es una maquinaria médica desarrollada para ayudar a la respiración humana. Normalmente, los pacientes tienen dificultades para respirar debido a diversas complicaciones de salud. Los ventiladores se clasifican según su funcionamiento y el tipo de paciente en el que se pueden utilizar.
La especificación de un ventilador es imperativa porque muestra las características de diferenciación y la funcionalidad del ventilador. Estas características y funciones se relacionan principalmente con el paciente. Algunas especificaciones esenciales del equipo de ventilación y su significado son las siguientes.
Frecuencia respiratoria
El número de respiraciones administradas por el ventilador por minuto es la frecuencia respiratoria. Esta capacidad de establecer el número de respiraciones tiene importancia porque permite la personalización de acuerdo con las necesidades del paciente. En los adultos sanos normales, la frecuencia respiratoria es de 12 a 20 respiraciones por minuto. En los bebés, es mucho más alta y puede oscilar entre 30 y 60 respiraciones por minuto.
Volumen corriente
Este es el volumen de aire que el ventilador administrará en cada respiración. Suele expresarse en litros o mililitros. Es posible ajustar el volumen corriente en el ventilador para que coincida con la capacidad pulmonar y las necesidades del paciente. El volumen normal es de aproximadamente 6 a 8 ml por kg para los adultos sanos.
Relación inspiración-espiración
El ventilador puede controlar la duración de la inhalación y la exhalación. En el caso de la respiración normal en adultos, la inhalación suele tener lugar durante 1 segundo y la exhalación durante 2 segundos, por lo que la relación es de 1:2. Sin embargo, el ventilador puede modificar esta relación para que el paciente reciba el volumen de aire necesario en cada respiración.
Detección de presión y volumen
El ventilador monitorizará la presión y el volumen durante cada respiración para garantizar que se alcance el volumen corriente prescrito a las presiones establecidas. También monitorizará la presión inversa de los pulmones para garantizar que no haya sobreinflación. Si es necesario exhalar más, se monitorizará la capacidad pulmonar para que el paciente pueda exhalar completamente. Esta monitorización es importante para evitar el barotrauma o la hipoventilación.
Una máquina de ventilación requiere un mantenimiento preventivo de rutina, que es esencial para un funcionamiento óptimo. La frecuencia del mantenimiento del ventilador depende del entorno de cuidados críticos, del uso por parte del paciente y de los programas recomendados por el fabricante. En general, se aplica el siguiente mantenimiento del ventilador.
El proceso típico de mantenimiento del ventilador es el siguiente:
El programa de mantenimiento puede ser más frecuente si el ventilador se utiliza para un paciente con bronquitis, neumonía u otra enfermedad infecciosa. También será necesario un reemplazo más frecuente del circuito.
Los siguientes escenarios ilustran los posibles usos de los equipos de ventilación.
Gestión de pacientes con infecciones respiratorias graves en salas de aislamiento y UCI
Los equipos de ventilación son cruciales para garantizar la supervivencia de los pacientes que luchan contra infecciones respiratorias graves como la COVID-19 o la neumonía. Estos pacientes pueden experimentar una disminución potencialmente mortal de los niveles de oxígeno, por lo que es imperativo ayudar mecánicamente a su respiración. Los ventiladores para pacientes infectados deben tener características como oxígeno calentado y humidificado para reducir la irritación de las vías respiratorias y las medidas de seguridad para la transmisión viral.
Estabilización del paciente en la sala de emergencias
En casos de traumatismo en los que el usuario del ventilador ha sufrido una lesión grave que podría poner en peligro su respiración, el personal médico de emergencia puede tener que utilizar un ventilador para estabilizar al paciente para la cirugía. Esto requiere ventiladores de emergencia que sean móviles, fáciles de instalar rápidamente y compatibles con diferentes circuitos respiratorios. Estos ventiladores garantizarán la estabilización inmediata de la respiración del paciente.
Ventilación mecánica a largo plazo en casa o en un centro de enfermería especializada
Los pacientes con trastornos neuromusculares pueden depender de los ventiladores para obtener apoyo respiratorio prolongado en los entornos de atención domiciliaria o de enfermería. Estos pacientes pueden necesitar ventiladores hechos a medida para adaptarse a sus necesidades únicas. Además, los ventiladores pueden necesitar ser portátiles para garantizar la facilidad de movimiento. La máquina deberá ser lo suficientemente sencilla para que el personal no médico pueda operarla, pero con suficientes sistemas de monitorización y alerta para garantizar un uso seguro.
Destete de los pacientes del ventilador
Algunos equipos de ventilación tienen características para reducir gradualmente el apoyo respiratorio para ayudar a los pacientes a adaptarse a la respiración independiente. Estos ventiladores pueden tener modos específicos, como el apoyo de presión, que fomentan la respiración espontánea. También pueden venir con una interfaz para el usuario, que permite a los cuidadores monitorizar al paciente de cerca. Como resultado, los pacientes hacen una transición segura de la respiración mecánica a la natural.
Transporte de pacientes gravemente enfermos
Los pacientes gravemente enfermos pueden tener que ser trasladados de una instalación a otra. En estos casos, serán necesarios ventiladores portátiles o aquellos que estén instalados en la unidad de transporte. Estos equipos de ventilación permitirán un apoyo respiratorio continuo y garantizarán la estabilidad del paciente durante el transporte. El ventilador deberá ser fácil de montar rápidamente y tener soporte de batería para funcionar cuando esté desconectado de las instalaciones eléctricas.
Seleccione los equipos de ventilación para UCI revisando las características clave, como su capacidad para manejar diferentes tamaños de pacientes y el rango de patrones respiratorios que admiten. Busque modelos que puedan acomodar desde neonatos prematuros hasta adultos. También compruebe si pueden dar diferentes modos, incluyendo asistencia-control y apoyo de presión, para satisfacer las necesidades únicas de los pacientes. Los equipos de ventilación para UCI deben tener interfaces fáciles de usar con pantallas claras y controles sencillos para que el personal médico ocupado los opere fácilmente. Las interfaces con indicaciones de texto, formas de onda gráficas y funcionalidad de pantalla táctil pueden mejorar la comprensión y agilizar los ajustes del ventilador.
Opte por ventiladores equipados con capacidades avanzadas de monitorización. Estas incluyen el volumen corriente, la presión de las vías respiratorias y la saturación de oxígeno. Algunos modelos tienen alarmas integradas que alertan a los cuidadores de posibles problemas, como desconexiones, bajos niveles de oxígeno o asincronía paciente-ventilador. Estos dispositivos de UCI pueden mejorar la seguridad del paciente y permitir una intervención oportuna. Considere ventiladores con capacidades de grabación y transmisión de datos. Algunos permiten guardar los ajustes del ventilador y los datos del paciente. Otros pueden transmitir esta información electrónicamente a un sistema central de monitorización o al historial médico electrónico (HME) del paciente. Al facilitar la gestión de datos, los ventiladores digitales de UCI pueden mejorar la coordinación de la atención al paciente y agilizar la documentación.
Evalúe los requisitos de copia de seguridad y reparación del ventilador. En casos de emergencia, es fundamental tener acceso a manuales de usuario exhaustivos, materiales de formación y asistencia técnica. Seleccione fabricantes que ofrezcan extensas sesiones de formación para profesionales de la salud y redes de asistencia técnica ampliamente distribuidas. Por último, considere los estándares de conectividad universales y de código abierto que permiten la integración fluida con otros sistemas y equipos hospitalarios. Estos estándares promueven la interoperabilidad y simplifican la prestación de atención, lo que permite a los profesionales de la salud acceder a los datos del ventilador y sincronizar los ajustes con otros dispositivos médicos de forma eficiente.
P1: ¿Cómo funciona un ventilador mecánico?
A1: El ventilador tiene dos fases principales, la fase de activación y la fase de administración. En la fase de activación, el paciente inhala y provoca un cambio en la presión que detecta la máquina. Entonces, el ventilador pasa a la segunda fase, la fase de administración, donde infla los pulmones con aire o una mezcla de aire y oxígeno.
P2: ¿Puede una persona conectada a un ventilador oír lo que está sucediendo a su alrededor?
A2: En general, las personas en ventiladores no oyen nada, ya que están sedadas y el proceso de ventilación implica mantenerlas en un estado de inconsciencia. Pero hay informes de algunos pacientes que no estaban completamente sedados y dijeron que podían oír a sus seres queridos y a los cuidadores hablando a su alrededor.
P3: ¿Cuáles son los cuatro tipos de ventilación?
A3: Los cuatro tipos son la ventilación de presión negativa, la ventilación de presión positiva no invasiva, la ventilación de presión positiva invasiva y la ventilación de alta frecuencia.
P4: ¿Cuál es la diferencia entre un ventilador y un respirador?
A4: Un respirador es un dispositivo médico que protege al usuario de la inhalación de partículas, gases y vapores peligrosos en el aire. Por otro lado, un ventilador es una pieza de maquinaria que salva vidas que se utiliza para ayudar a los pacientes a respirar cuando no pueden hacerlo de forma independiente.